La naturaleza se nos muestra eterna y elegante cuando volvemos a verla. En un atardecer meditabundo; en la neblina de unas cumbres borrascosas; o caminando por una playa mínima y desierta. Se muestra inmensa y diáfana en contraste con los veleros y botes como breves origamis, y en el cielo celoso del espejo del agua donde flotan inmóviles. Las jirafas intuitivas y silvestres de la sabana africana alcanzan a comer las hojas altas pintadas de acuarela antes que sus colores inunden nuestros ojos enamorados.
La obra de Viviana Meissinger ha participado en el Festival Internacional UrbinoInAquarello 2019 y 2020, en Italia.
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Aquí una selección de su reciente producción: